PLAZA DEL POZO


Este es uno de los más típicos lugares de Cartagena. La Plazoleta del Pozo tiene una historia que se pierde en la socorrida “noche de los tiempos”. Para la época de la Colonia fue testigo de sangrientas reyertas entre la gente de mar que trabajaba y merodeaba en el Arsenal y Playa de la Barahona. Ya en pleno siglo XIX, el lugar volvió a convertirse en centro de jolgorios bulliciosos, sobre todo, para la época en que llegó de Gobernador de la ciudad el General José María Obando, en el año de 1849.
Al finalizar .dicho siglo, los moradores del barrio Jimaní, se dedicaron a organizar “fandangos” públicos que no eran otra cosá que unas especies de paseos cívicos, encabezados por bandas de músicos, banderolas y toda clase de instrumentos para formar el consiguiente bullicio. Estos “ fandangos”, recorrían las principales calles de la ciudad y al llegar la noche del 5 de enero, visperas de los Reyes Magos, salía del patio de la casa de propiedad de una señora González, el típico “carro alegórico”, llevando lindas muchachas denominadas “diosas”. Desgraciadamente, la política metió baza en aquellas festividades y surgió la pugna entre lo habitantes de Chambacú, todos cónservadores y los de la Plazoleta del Pozo, donde vivían los liberales. Para colmo de males, en uno de esos “fandangos”, mataron a nuestro pariente Leopoldo Porto González y la familia se volvió airada con ánimo de hacerse justi
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